LOS DESAFÍOS DE LA AGENDA 2030 EN AMÉRICA LATINA ANTE LA PANDEMIA, EN EL MARCO DE LA COOPERACIÓN Y EL MULTILATERALISMO
Por: MESA DE ARTICULACIÓN
Por: Laura Becerra Pozos*
Los escenarios para la región de América Latina y El Caribe
CEPAL ha advertido sobre el riesgo del no progreso de la Agenda 2030, debido a la pandemia del COVID-19, entre otras razones, por la forma desigual del avance de los ODS en los países de la región de América Latina y el Caribe (ALC) y ante ello sugiere la promoción de pactos entre sectores estratégicos y prioritarios para un gran impulso ambiental.
Igual CEPAL pronostica que este año Latinoamérica experimentará una recesión del 5,3% en su Producto Interno Bruto (PIB), la peor tasa de la historia, inferior incluso al récord negativo de 1930. Bárcena explicó que las causas de tal caída, -todas asociadas al COVID- 19-, son la reducción del comercio internacional, la caída de los precios de las materias primas, la intensificación de la aversión al riesgo, el empeoramiento de las condiciones financieras mundiales, la menor demanda de servicios turísticos y la reducción de remesas. El informe indica que América del Sur se contraerá 5,2%, América Central 2,3% y la economía del Caribe se reducirá 2,5%. Calcula que América Latina y el Caribe llegará a 11,57 millones más de desempleados, lo que representa que la tasa de desempleo aumentará de 8,1 a 11,5%, llegando a 37,71 millones de personas en paro.
Alicia Barcena, en un panel de alto nivel organizado por el gobierno de México, explicó: “Hemos analizado el avance de 72 series estadísticas de los indicadores de los 17 ODS para la región: cuatro alcanzaron la meta 15; 15 van en la tendencia correcta; ocho necesitan más intervención de políticas públicas; 27 están estancadas y 5 en retroceso.”
El destacado académico Arturo Guillén considera que: “México ha experimentado un proceso de semiestancamiento económico a lo largo de 35 años de neoliberalismo, en los cuales el crecimiento promedio anual del PIB fue de alrededor del 2%, 1% en términos per cápita. El gobierno de AMLO, quien pretende abandonar la ruta neoliberal, no ha logrado modificar dicho cuadro de estancamiento. En 2019, el PIB decreció 0.1%, su primer decremento desde 2009. La contracción del último año obedeció en gran medida, al desplome de la inversión. La inversión privada disminuyó 4.9 %, su caída más pronunciada desde 2009 durante la Gran Recesión.”1
En efecto, la llegada del COVID-19, ha puesto al descubierto o evidenciado, los problemas estructurales que enfrentan los países de la región de ALC, que en mayor o menor medida, han seguido las políticas del modelo neoliberal, que ya constituían un obstáculo para avanzar en la mayor parte de los ODS. Por eso, si ya se había reconocido que la implementación de la Agenda 2030 tenía como desafío el cambio del modelo económico, ahora ese cambio es estratégico para que los ODS y sus metas sean el piso básico para no perder el horizonte de la universalidad y multidimensionalidad de la Agenda 2030.
En ese contexto regional, la titular de la CEPAL recomendó las medidas que debe adoptar la región para hacer frente a ese escenario, donde destaca la necesidad de acceso a financiamiento externo en condiciones de emergencia: “Es urgente acceder a recursos financieros con base en un apoyo flexible, de los organismos financieros multilaterales… Acompañado de líneas de crédito a bajo costo, alivios del servicio de la deuda y eventuales condonaciones, además de repensar el modelo de inserción de la región.”
Para Guillén, cualquiera que sea el desenlace, es indudable que la recesión será profunda y que el desempleo y la informalidad aumentarán con fuerza; sin duda también, se recrudecerá la concentración del capital y del ingreso, y el capital intensificará la explotación de los trabajadores.2
Tendría que seguir siendo una preocupación, contar con los medios de implementación considerando la cooperación y en particular la Ayuda Oficial para el Desarrollo (AOD), donde –como lo hemos señalado en otras oportunidades- la cooperación internacional para al desarrollo debe ser una opción disponible para los gobiernos nacionales. Además de tener presentes y en el radar, otros instrumentos o convenios internacionales signados por los gobiernos, entre ellos, la Agenda de Acción de Addis Abeba, el Consenso de Montevideo, el Acuerdo de París y el Acuerdo regional de Escazú, que son fundamentales para el progreso de la Agenda 2030.
El 18 de mayo pasado, Alicia Barcena de CEPAL, en una conferencia y diálogo virtual con sociedad civil, reiteró que en la situación actual es muy importante la exigencia de una mayor cooperación y una creciente integración regional, en el marco de una gobernanza internacional inclusiva y sostenible, a la que aspiramos.
Diversos actores consideran que la pandemia mundial, es una oportunidad para revisar el rol del Estado y que los gobiernos, junto con la sociedad civil, convengan los cambios necesarios para evitar el deterioro del planeta, colocar los derechos humanos como eje y política de Estado, cumplir con sus compromisos para lograr el desarrollo sostenible.
Los gobiernos enfrentan y tendrán que atender-resolver las tensiones actuales, para elevar la cobertura y calidad de la salud y la educación públicas, favorecer el trabajo digno, lograr una movilidad segura y en general, cumplir con la universalidad de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales, entre muchos otros desafíos, que el COVID-19 ha colocado.
Implica exigir que los compromisos asumidos por la cooperación internacional para el desarrollo y en particular la cooperación Sur-Sur, entre los países desarrollados y los de renta media o baja, se revisen y activen para responder de manera efectiva al actual escenario de crisis generalizada en la región, sin abandonar los Objetivos de la Agenda 2030 y relevando la participación de la sociedad civil.
“La cooperación internacional y las organizaciones multilaterales deberían diseñar nuevos instrumentos técnicos y financieros para apoyar a los países que se enfrentan a la presión fiscal. Deben, asimismo, considerar la posibilidad de conceder préstamos con bajos intereses y ofrecer alivio y aplazamientos de la deuda para aumentar el espacio fiscal.” 3
Sin embargo, la CEPAL considera que: “Más allá de cualquier modelo predictivo, la acción de los gobiernos se está llevando a cabo sobre la base de procesos de prueba y error. En algunos casos la crisis sanitaria está adquiriendo elementos de crisis política, como se ve en la contradicción frecuente entre autoridades locales y gobiernos centrales o entre países en el seno de bloques de integración regional. Más aun, la desprotección de los sectores más pobres y las dificultades que enfrentan para obtener bienes básicos imprescindibles ya ha llevado a estallidos sociales.”4
Los retos del multilateralismo comprometido con la Agenda 2030
Desde la perspectiva del multilateralismo, la integración regional y global es fundamental para el cumplimiento de la Agenda 2030, incluso se ha reiterado por parte de diversos actores –entre ellos la sociedad civil- la relevancia de un pacto mundial o global para asegurar su progreso efectivo.
A diez años de alcanzar la Agenda 2030, se coincide en que la pandemia llega en el marco de más de una década de descrédito y desconfianza en la globalización y el multilateralismo, que no favorece el rol que se espera para que los países de la región cumplan su compromiso.
Particularmente este año 2020 está marcado por el 75 aniversario de las Naciones Unidas, así como el comienzo de la última década para alcanzar los ODS de la Agenda 2030. En tal sentido el Secretario General, otras autoridades de las Naciones Unidas y varios Estados Miembros han destacado la importancia del Aniversario como la oportunidad de abordar los retos de la gobernanza mundial y revitalizar el sistema de las Naciones Unidas para lograr un cambio significativo en la vida de las personas en todo el mundo.5
Los Estados Miembros de la ONU están negociando un primer borrador de la Declaración Política que esboza 12 compromisos vinculados a los ODS de la Agenda 2030 que esperamos sean asumidos:
“No dejaremos a nadie atrás Protegeremos nuestro planeta
Trabajaremos para garantizar la paz y la seguridad Acataremos las reglas y normas internacionales Colocaremos a las mujeres y a las niñas en el centro Construiremos la confianza
Promoveremos el uso de nuevas tecnologías para el beneficio de todos Modernizaremos las Naciones Unidas
Aseguraremos la financiación Impulsaremos las asociaciones”
El borrador cero de la ONU afirma: “Aseguraremos la financiación. Ninguna de nuestras aspiraciones se realizará a menos que haya una financiación sostenible de la organización. Pagaremos nuestra cuota en su totalidad y a tiempo. Deberían explorarse medidas para asegurar mejor esto. La aplicación del Programa de Acción de Addis Ababa sobre la Financiación para el Desarrollo es fundamental para la ejecución de la Agenda 2030. La financiación conjunta de los sectores público y privado desempeña un papel fundamental en nuestros esfuerzos por lograr que las Naciones Unidas cumplan mejor sus propósitos”.
Para terminar este breve recorrido sobre el proceso de la Agenda 2030 en la actual situación que vivimos a nivel global, hacemos un llamado a que el Foro Político de Alto Nivel, que tendrá lugar en la ONU en julio de 2020 (7 al 16 de Julio), con el eje temático Acción acelerada y vías de transformación: realización de la década de acción y entrega para el Desarrollo Sostenible”, considere los grandes desafíos que tenemos en la región para avanzar con el referente de la Agenda 2030 y la participación de todos los actores del desarrollo incluida la sociedad civil.
*Directora Ejecutiva de DECA, Equipo Pueblo, AC Punto Focal del Grupo Redes, Colectivos y Plataformas de ONG del Mecanismo de Participación
de OSC ante el Foro de Desarrollo Sostenible de CEPAL
Junio-2020
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1. La economía mexicana en el marco de la pandemia y de la crisis económica global; Arturo Gillén, Profesor Investigador de la AUM Iztapalapa, México, Junio 2020, 5
- 2.Idem p. 7
- 3 América Latina y el Caribe ante la pandemia del COVID-19; Informe Espacial, COVID-19 No 1, CEPAL, Abril 2020
4 Idem
5 Observatorio de políticas Globales de Social Watch, Junio 2020